ABEJAS, LAS MEJORES POLINIZADORAS DE LA PENÍNSULA IBÉRICA

 Abeja ibérica (Apis mellifera iberica), conocida también por abeja española, es predominante en la Península Ibérica. Es la abeja usada habitualmente por los apicultores en España. De ellas obtenemos la miel, propóleo y ceras. Su trabajo es muy importante, ya que contribuyen activamente a la supervivencia de muchas especies de plantas, que se reproducen gracias al transporte de polen que llevan a cabo estos pequeños animales al alimentarse del néctar de las flores. Muchas de estas plantas las usamos los seres humanos para producir algunos de nuestros alimentos. 

Esta abeja es la gran polinizadora de nuestra Península Ibérica.

Aquí, en estas fotografías que hice en el huerto familiar, la vemos en acción, polinizando flores, tanto de árboles frutales (naranjo y limonero) como flores silvestres. 

Las abejas son los insectos polinizadores por excelencia.

Su trabajo es crucial para la polinización, tanto de cultivos como de plantas silvestres.

Las abejas tienen una función esencial para el equilibrio de la naturaleza. 

En la foto inferior vemos un naranjo en flor en el huerto, con las famosas y perfumadas flores de azahar, y observamos una naranja aún verde. El resto de naranjos están cargados de naranjas listas para ser cogidas. A pesar de estar en invierno, cualquiera diría que este árbol cargado de flores de azahar, corresponden a una estampa típica de primavera. 

Se conocen más de 20.000 subespecies distintas de abejas divididas en 7 familias reconocidas.

Viven una media de cinco años y no miden más de 1.5 centímetros.

Estos  insectos habitan en todos los continentes de la Tierra excepto en la Antártida. Dicen que es uno de los insectos más antiguos que pueblan nuestro planeta.

Las abejas viven en colonias que se establecen en forma de enjambres y se organizan en una estricta jerarquía de tres rangos: la abeja reina, los zánganos y las abejas obreras.

El papel que juegan las abejas en el medio ambiente es fundamental, ya que su labor de polinización es insustituible. Sin polinizadores un tercio de nuestra alimentación desaparecería, y también lo haría parte del forraje que alimenta a los ganados que comemos. 

Desde hace unos años hay alarma, debido a que se están perdiendo las colonias de abejas, con lo importante que son para la vida. Las causas de su muerte son diversas, la contaminación del aire, tanto por el porcentaje de CO2 como por las ondas magnéticas enviadas por las antenas de telefonía móvil, pesticidas, parásitos, monocultivos, etc.

La abeja es un auténtico detector ecológico porque su cuerpo está cubierto de pelos que capturan las substancias que entran en contacto con ellos, es sensible a muchos productos tóxicos y visitan todos los sectores ambientales: suelo, vegetación, aire y agua, y almacenan gran diversidad de productos en las colmenas. 

El medio ambiente es responsabilidad de todos, y quería compartir con todos vosotros/as esta información, para conocer un poco mejor a estos importantes insectos, que son las abejas, y así poder valorarlas aún más, pues sin abejas no hay polinización, ni gran parte de la comida de animales y humanos que el mundo necesita. 

Espero que os resulte interesante este post.